Wanda Nara en Jujuy: Un reencuentro con lo esencial
- Revista CHE
- 25 jun
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| Actualidad |
El silencio de la Quebrada, el sol de invierno cayendo sobre los cerros de colores, y la calidez de la comunidad jujeña fueron el escenario elegido por Wanda Nara para una escapada familiar inesperada, lejos del ruido de las grandes capitales y de las cámaras del espectáculo. Esta vez, la empresaria e influencer apostó por lo esencial: naturaleza, tranquilidad y conexión.
Acompañada por sus hijas, Wanda aterrizó en Jujuy en avión privado y se trasladó directamente a Purmamarca, uno de los pueblos más emblemáticos del norte argentino. Su presencia no pasó desapercibida: con un look relajado y una actitud cercana, saludó a quienes la reconocieron, se sacó fotos con vecinas y compartió escenas del viaje en sus redes.

Lujo verdadero: el que no necesita brillar
En lugar de shopping y luces, la postal fue otra: cerros rojizos al atardecer, un picnic sobre un mantel a cuadros, y platos regionales compartidos en familia. La estrella mostró otra cara, menos conocida, más auténtica. En sus stories se la vio recorrer caminos de tierra, descansar en una casa con vista panorámica, y disfrutar de un jacuzzi al aire libre al amanecer.
Agradeció públicamente la calidez con la que fue recibida en Jujuy y compartió su asombro por los paisajes. Pero más allá del contenido para redes, lo que dejó su paso fue una señal clara: el verdadero lujo hoy es estar en contacto con la tierra, con los afectos, con lo real.

Un destino que emociona
La elección de Wanda no fue menor. Su visita puso nuevamente en el centro de escena a Purmamarca, Patrimonio de la Humanidad y joya de la Quebrada de Humahuaca. Este tipo de escapadas visibilizan el potencial turístico de Jujuy, no desde el espectáculo, sino desde la experiencia transformadora que ofrece su territorio.
Porque más allá de lo mediático, hay algo profundamente humano en volver al origen, al silencio, al color del adobe, al viento entre los cardones. Y eso, parece, también seduce a quienes están acostumbrados a vivir rodeados de lujos.

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