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  • Foto del escritorRaquel Abraham

"Hice todo lo que hubiese querido hacer"


Es una tarde de lluvia y Mariana Lazarte, la periodista que vemos a diario por la pantalla de Canal 7, ya está sentada en un café del barrio Ciudad de Nieva, esperándonos para esta entrevista. Cuando me acerco a saludarla, me envuelve en un abrazo afectuoso, como si fuéramos viejas amigas. Su sonrisa amplia y esa voz cálida que nos es tan familiar a los jujeños desde hace décadas, aflojan la solemnidad del encuentro periodístico. Es la primera vez que charlamos mano a mano, y presiento que, más que una entrevista, vamos a compartir una charla entre dos mujeres, con ganas de conectarse y hacer causa común con tantos temas propios de nuestro género, esos que suelen sobrevolar en las charlas femeninas: la maternidad, el desarrollo profesional, la culpa que sentimos cuando estamos ausentes, el cuidado de nuestro cuerpo y nuestra salud. Claro que también hubo espacio para el humor y para reírnos de nosotras mismas para desdramatizar las dificultades de la vida cotidiana.



Cuando la veo, pienso que la televisión no hace justicia con su mirada: tiene unos ojos de un verde agua casi transparente que contrasta con su pelo negro, lacio y brillante. Mariana tiene un aire de diva, esa elegancia natural y magnética, aunque pareciera no darse cuenta: Es sencilla al expresarse, templada al hablar, sonríe con franqueza y muestra su vulnerabilidad sin falsa molestia. Es una mujer que ha recorrido ya un largo camino, pero tiene todavía la chispa de la juventud y el entusiasmo contagioso de quien hace lo que ama.




¿Siempre quisiste ser comunicadora y dedicarte a los medios?

La verdad que la primera vez fue todo un juego. Me interesó cuando Gustavo Ponce me llama para radio Transamérica, que era la primera FM de Jujuy y me pareció interesante. Estaba en 5° año de la secundaria y me iba a ir a estudiar Veterinaria (¡nada que ver!). Empecé a practicar con Gustavo y me gustó. Aparte a esa edad, 17 años, era todo un desafío hacerlo. Luego llegó fin de año y Fernando Marcos me busca de la Transamérica para hacer un programa que se llamaba “Entre Nosotros”, hace 27 años, y empiezo a trabajar en LW8 pero en un programa independiente de la empresa. Así me conoce la empresa y así empiezo este camino de la comunicación. Después terminé la secundaria y me quedé en Jujuy perfeccionándome aquí.


¿Tu familia y amigos te decían que tenías voz de locutora?

Sí. La voz siempre la tuve, mi papá también tiene esta voz, y tengo uno de mis hijos, el más chiquito, que tiene una voz radial.


¿Toda tu carreara laboral la desarrollaste en Radio Visión Jujuy?

Hace 26 años que estoy en Radio Visión. Estuve por todos los lugares del multimedio: AM, FM, Canal 7, los noticieros, flashes de la tarde, redacción…


¿Te acordás de tu primera vez en cámara?

Sí, había gente muy buena. La primera aparición fue al mediodía en un noticiero con Jorge Solís, un apoyo increíble. Él ya era el “Perro”, súper conocido y muy buena gente como es. A la noche hacía el noticiero con Ricardo del Cura, con otra personalidad, más serio, más rígido, pero con un corazón… Me decía: “Ahora te explico cómo presentás la nota que viene”. Los primeros años fueron con gente muy buena.


También vivieron momentos duros, como la muerte de compañeros de trabajo. El caso de Juan Carlos Zambrano fue paradigmático. ¿Cómo lo viviste en lo personal?

Fue durísimo recibir un llamado telefónico temprano, casi madrugada.El que me llama es Gustavo Jaramillo, que también falleció. Me lo dice muy sutilmente, porque yo estaba embarazada de mi segundo hijo. Fue una sensación terrible. Sabíamos la información que manejaba, pero lo habíamos visto tan bien y vital en su último programa. Es una sensación de vacío la pérdida de un compañero. Igual que la de Gustavo, quien al poco tiempo fallece en un accidente de tránsito. Horrible.




"Me gusta transmitir lo que aprendí"

Siempre fuiste una referente de la Fiesta Nacional de los Estudiantes, en la conducción de distintos eventos. ¿Vivís ese momento con nervios?

Sí. Me encanta la adrenalina, pero lo sufro horrores. Adrenalina que siento una vez al año, en septiembre, en la elección de la reina nacional.


¿No es comparable a los nervios del vivo en televisión?

No. Obvio que la cámara, todos los días, es un nervio igual y si te equivocás, te equivocaste. Pero en un estadio, tenés que lograr que el miedo no te invada para que la voz siga intacta, la respiración. Empiezo a utilizar todas las técnicas que aprendí. Pero me encanta, es una de las sensaciones más lindas de esta profesión.


También hiciste y hacés programas dedicados a la mujer. ¿Te sentís una referente del género?

Los programas se dieron circunstanciales porque fueron de productores que me hablaron. Pero sí, siempre me gustó, me siento bien cuando me veo bien. Hay momentos en vacaciones, en la casa que digo y si no me peino hoy? Pero lo hago, es como que forma parte de mí.


¿Lo aprendiste de alguien?

Sí, mi mamá era igual. Yo puedo estar con tacos en mi casa, porque me siento cómoda y los manejo bien. No es un sacrificio.


Alguna vez fantaseaste con dedicarte a otra cosa, o ser comunicadora te define quién sos?

Me gusta mucho esto. La comunicación me gusta. Me gusta la tele, la radio, la comunicación con la gente. Lo podría hacer desde otro lugar también, me gusta enseñar. Por eso con Gustavo Martínez damos cursos de locución. Me gusta transmitir lo que aprendí y lo que no me decían. Lo que está en los libros es una cosa, pero hay gente con experiencia que te enseña mucho más. Si tenés que ser un orador político, una maestra, a mí me gusta transmitir eso, para que se queden tranquilos y sepan cómo hacerlo.




"Tengo la familia que siempre soñé"

Mariana tiene dos hijos varones, Tadeo, de 14 y Tobías, de 10. Actualmente no está en pareja y está feliz con la familia que conforman los tres. Dice estar agradecida por el vínculo que tiene con sus chicos.


¿Cómo conjugas tu maternidad y momentos de ocio, con una profesión tan demandante como el periodismo, en la que a veces no hay feriados ni fines de semana?

Cuando eran más chicos se me complicaba, ahora uno tiene 14 y el otro 10. Se me complicaba por ahí en algún momento, cuando eran muy bebés. La abuela de ellos me ayudaba. Después crecieron y tuve que empezar a resolver mis cosas los tres. Mi hermano Osvaldo me ayuda muchísimo, por ejemplo los feriados, mi hermano Gustavo, que vive en Córdoba, también siempre está presente. Con el paso del tiempo, se fueron acomodando las cosas. Hoy los feriados no los trabajo, entonces soy feliz estando con ellos, son mis momentos. Igual ellos crecieron acostumbrados a esto, noticieros de noche y medianoche. ¡Viste que cuando comenzás, haces de todo! Y se fueron acomodando y acostumbrando. Me voy a grabar y lo tienen incorporado. Por ejemplo, los días que grabo Sello de Mujer , que son los miércoles, saben que no vuelvo a la siesta.


¿Ya no hay culpas?

No, ya no hay culpas. A pesar de que uno cree que no, después igual los seguís priorizando. Yo priorizo a la familia y a los hijos. Te puede gustar mucho lo que hagas, pero tenés que tratar de acomodarte en los horarios que ellos no te necesitan. Por ahí si duermen a la siesta, tenés que sacrificar tu siesta y trabajar. Los chicos te pasan factura. Y me pasó, por ahí me reprochan y me dicen: “pero si vos trabajabas toda la tarde”, y era cierto.




¿Cómo te llevás con el paso del tiempo? ¿Lo combatís o lo asumís?

No me pasó esto de sentir el cambio marcado de década, tengo amigas que se deprimían. Yo no me doy cuenta. Llega mi cumpleaños y lo vivo divino. Hago ejercicio porque me di cuenta de los beneficios. Hay que tener conducta. Trato de cuidarme: como normal, hago gimnasia tres veces a la semana, una hora (tampoco me mato). Me cuido el pelo, más allá de que esté o no al aire. Hacer el noticiero te implica estar siempre bien, maquillada y arreglada. Pero mas allá de eso me cuido igual. En vacaciones voy a la peluquería, si salgo me maquillo, me cuido la piel. En una de las notas del programa hablamos con mi esteticista de cómo cuidarse antes de que aparezcan las señales. Tengo cuidados que me hacen sentir bien.


¿Y cómo es Mariana en casa, puertas adentro?

Los años también me fueron cambiando, me siento más tranquila. Me siento realizada en mi vida personal. Lo mejor que me paso fue el nacimiento de mis hijos sin lugar a dudas y en lo profesional hice todo lo que hubiese querido hacer dentro de Jujuy. Fuera de Jujuy quizás puedan haber proyectos. Pocas cosas me enojan. Me enoja la mentira, la falta de respeto, esas cosas me molestan y me pueden llegar a sacar de mí. Me siento agradecida con la vida que hice y tengo la familia que soñé. Volvería a hacer lo mismo, pero cambiaria algunos detalles. Estoy contenta y en paz.




KIT PRIVADO DE MARIANA


Ropa: Tucci

Comida: Ñoquis con pollo

Postre: Tarta de frutas

Serie: Elite y La casa de papel

Una obsesión: Sacar los pelos de mis gatos


 

por Raquel Abraham

Periodista y comunicadora. Amo contar historias propias y ajenas. foto Ollie Wright

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